Fuentes consultadas por Periodismo365 confirmaron que el martes 12 de enero en horas de la medianoche, el vehículo sanitario circulaba por calle 46 entre 49 y 51 del barrio AIPO 160 viviendas, trasladando a un paciente discapacitado en silla de ruedas, desde la guardia del Hospital hacia el domicilio particular del mismo.
"Hacía demasiado calor a esa hora de la madrugada, y al transitar por esa zona que está totalmente a oscuras porque no hay ninguna iluminación en la vía pública; pudimos ver con las luces de la ambulancia que había una patota de menores bebiendo al costado de la calle. En ese momento y de golpe comenzaron a llover piedrazos y ladrillazos sobre la ambulancia, que sufrió la rotura total de uno de sus vidrios laterales. Gracias a Dios ninguno de los ladrillazos impactó al paciente discapacitado ni al chofer y el enfermero. Así y todo no paramos, decidimos seguir viaje porque corría peligro nuestra integridad física y la del paciente", explicaron las mismas fuentes.
"Ya no se puede circular por algunos barrios porque son muy complicados a toda hora del día", aseguraron. Se formalizó denuncia en Comisaría 4º.
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