El ministro de Educación, Esteban Bullrich, anunció este martes que el Poder Ejecutivo enviará proyectos de ley que contemplan desde modificaciones al código penal para agravar penas por agresiones a docentes, la extinción de la obligatoriedad de la educación formal desde los 3 años y modificaciones en la formación docente.
El funcionario precisó que “hoy la mitad de los jóvenes no termina el secundario”, y agregó que “uno de cada cuatro jóvenes no comprende textos” y que “uno de cada 10 argentinos llega al título universitario”. Bullrich se refirió a la evaluación educativa, el boleto estudiantil y los despidos en diferentes programas socioeducativos que responden a esta cartera.
Lo que dijo y no dijo el ministro
Evaluación: Bullrich remarcó la creación de la Secretaría de Evaluación del nivel primario y secundario. En este sentido, expresó que van a querer evaluar en forma trianual y una evaluación especial a 3ero grado sobre lectoescritura. Respecto a esta controvertida medida, se atajó y dijo que "no harán ranking de escuelas ni serán evaluaciones estandarizadas". Se utilizarán, según dijo el ministro, solamente para tener una radiografía del estado de situación y que hay que “perderle miedo a la evaluación y generar consensos”. En forma controvertida expresó que hoy los maestros y maestras enseñan para aprobar las evaluaciones.
Como venimos debatiendo, estas evaluaciones -ya aplicadas en algunas escuelas de la Ciudad de Buenos Aires y promovidas cuando el ministro dirigía la cartera de Educación porteña- se realizan sobre la base de pruebas internacionales estandarizadas, como las Pruebas PISA (Programme for International Student Assessment) PIRLS y TIMSS. Estas pruebas estandarizadas se limitan a evaluar y comparar “competencias”, “conocimientos” y “destrezas” de los estudiantes para desempeñarse en la vida cotidiana, habilidades que pueden ser adquiridas tanto en la escuela como fuera de ella y, que por lo tanto, recortan y abstraen lo que evalúan de la currícula, es decir, hábitos culturales, situación socioeconómica, contexto socio político, estructura escolar, condiciones de enseñanza aprendizaje y proyecto educativo, de cada país.
Educación inicial: “Queremos que el Congreso debata la modificación de la Ley de Educación Inicial”, enfatizó Bullrich. Con respecto a los proyectos de ley anunciados, el primero consiste en que la educación formal en Argentina se inicie a los 3 años, una propuesta que había formulado el presidente Mauricio Macri durante la campaña. “Queremos construir 3 mil jardines de infantes en los próximos 4 años”. Lo que no dijo es que no hay un plan de construcción de jardines, sino de los ya conocidos CPI (Centros de Primera Infancia) que precarizan a sus trabajadores y no reúnen las condiciones de enseñanza y aprendizaje. Tampoco dijo de dónde va a sacar el dinero.
Salario y formación docente: “No basta con mejorar los salarios de los docentes. También necesitamos que como sociedad los valoremos”, argumentó el ministro. En esta línea, agregó la necesidad de “trabajar fuertemente en la formación docente” tanto con los que “ya están en las aulas” como con los que “quieren ser docentes”. “La revolución educativa no se consigue sin los docentes. No basta con aumentos salariales”, insistió el titular de la cartera de Educación.
Lo que no dijo el ministro fue que el mismo día en que concurrió al Congreso, los docentes de Santa Cruz, Tierra del Fuego y Santiago del Estero tuvieron largas jornadas de pelea por sus condiciones de trabajo.
Despidos en Educación: interrogado por los despidos en el plan Conectar Igualdad, las Orquestas y Coros infantiles, el Plan FinEs, el programa educativo artístico ABC, programa CAJ entre otros, el ministro se pronunció. “Hay una sobredimensión (de personal) en la Capital Federal y falta en el interior (...) Eso se corrigió porque queremos trabajar con las provincias”, explicó. Un aval a los despidos.
Boleto Educativo: “Me encantaría que sea la solución, pero no creo que esa sea la solución para que un chico termine el secundario” y agregó “de qué puede servir el boleto si el problema es que hay chicos que llegan a la universidad sin saber leer o escribir, el boleto no soluciona eso”. Estas fueron las declaraciones del ministro Bullrich en respaldo de la ilegalidad en la que incurre María Eugenia Vidal en la Provincia de Buenos Aires, negándose a implementar el boleto para no tocar las jugosas ganancias de los empresarios del transporte.
Como expresan los fundamentos del proyecto sobre Boleto Educativo Gratuito, que presentó el Frente de Izquierda, “La creación del Boleto Educativo gratuito destinado a estudiantes, docentes y no docentes de todos los niveles tiene estrecha relación con el derecho a acceder a una educación pública, gratuita, laica y de calidad. La gratuidad de la educación no puede basarse en el simple concepto de no arancelamiento, sino que incluye la garantía de acceso irrestricto e igualitario, derecho que se encuentra restringido para miles de niños y jóvenes según su nivel socioeconómico”.
FUENTE Y FOTOS: La Izquierda Diario - Periodismo365
Segregación y discriminación educativa
ResponderEliminarLa educación argentina no se imparte para todos. Hay segregación educativa y discriminación , resultado del producto de un metamorfismo consciente o inconsciente; germinado y mantenido en el tiempo y en el espacio por los tutores nacionales y provinciales, encargados de garantizar la educación como un derecho fundamental de la vida. Han encontrado una máscara llamativa y perversa como mantenerse indiferente, el desconocer, el no involucrarse, el silencio, el no responder. Y en lo violento como en el incumplimiento de las Leyes y Artículos de la Constitución Nacional en cuanto se refiere a Educación, igualdad, libertad y derechos