SCANIA TUCUMÁN SUSPENDE A CASI LA TOTALIDAD DE SU PERSONAL

La autopartista suspendió a 360 obreros al 75 % del salario. Trabajadores desmienten al secretario General del Smata.

Desde esta semana 360 trabajadores de la planta industrial de Scania, ubicada en Colombres, han sido suspendidos por quince días. Para cumplir con este objetivo la patronal adelantó una semana de vacaciones pendientes a 250 trabajadores que luego serían afectados por otra semana más de suspensiones. Para el resto de los trabajadores las suspensiones se aplicarían desde el principio.

Luis Diarte, secretario General del Smata de la provincia, aseguró que "el origen de ambos casos se debe a que la actividad atraviesa por una situación de mucha preocupación por la caída de las ventas a Brasil y a otros países. Aunque las suspensiones no afectan los sueldos de bolsillo, sí nos preocupa el futuro de la industria” (La Gaceta, 13/07/2016). Con el mismo vocabulario de un gerente de producción, a esta maniobra Luis Diarte la llama “una parada técnica”.


Sin embargo, trabajadores de la planta no tardaron en hacer llegar sus denuncias a La Izquierda Diario desmintiendo al dirigente metalmecánico: “las suspensiones ya estaban pautadas de antemano con el gremio que a principio de año arregló con la empresa que no nos podríamos tomar las vacaciones enteras y que teníamos que dejar una semana pendiente para tomarla en esta época del año. Por otro lado es mentira que las suspensiones no afectan nuestros salarios, porque las están pagando al 75%”.

A pesar de la preocupación del dirigente metalmecánico por las finanzas de la empresa, en los últimos años la autopartista que exporta su producción a Brasil y Suecia declaró ganancias netas por 329 millones de pesos (2013), y 228 millones de pesos (2014). Y aun así por aquellos años también hubo suspensiones y despidos con el mismo argumento de la crisis.


Todas las empresas “dibujan” los balances que presentan a la Inspección General de Justicia para esconder ganancias, y si bien no están disponibles aún los balances del 2015 aún descontando una fuerte caída en los ingresos de la filial tucumana de esta multinacional sueca, la excusa de la “crisis” es siempre un argumento que las patronales usan contra los trabajadores.

A esto se le suma ahora un avance en la flexibilización laboral a partir de la incorporación de “pasantes” secundarios en puestos de trabajo que hasta ahora se cubrían con trabajadores de la planta permanente y que se profundizará de aprobarse el proyecto de ley que impulsa el gobierno de Macri del “Programa de primer empleo”, mediante el cual estas empresas recibirán exenciones impositivas y subsidios por aumentar la flexibilización laboral.

Por otro lado, la autopartista ya está negociando para ser incluida como beneficiaria de los REPRO, subsidio que gobierno nacional le da a las empresas para que se ahorren el pago de una parte de los salarios. Queda claro entonces que mientras el gobierno subsidia a los empresarios, una vez más la variable de ajuste, para la empresa y el sindicato, es el salario de los trabajadores.

Jugando para la patronal

Frente a una amenaza de despidos, el Smata le propone a los trabajadores aceptar el chantaje de las suspensiones argumentando que la situación de la patronal “es compleja”.

A nivel nacional el Smata fue el impulsor de una ley de “desarrollo y fortalecimiento de la industria autopartista”, en búsqueda de mayores beneficios para los patronales del sector. En la sesión de la Cámara de Diputados, Myriam Bregman (PTS-FIT) rechazó el engaño tras la ley: “Ya en la década del 90 se hablaba de la ‘ley del derrame’. Esta ley, que ha generado indudablemente tantas expectativas, se basa en la misma lógica: se dice que si se ayuda a estas empresas, por derrame, los trabajadores se van a ver beneficiados. Pero ya vimos que esa ley es falsa y que siempre se beneficia a los de arriba y se perjudica a los de abajo”. Finalmente, la ley fue aprobada por el Senado.

FUENTE Y FOTOS: La Izquierda Diario - Periodismo365

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