Asombro, pesar y ceños fruncidos. Esas fueron algunas de las reacciones en el sector vitivinícola al conocer la noticia de que una moderna bodega pyme sanjuanina dejará de fraccionar etiquetas locales para focalizar su negocio en la comercialización a granel.
Los directivos de Finca del Enlace, en 25 de Mayo, anunciaron que a partir del 2017 la bodega dejará de elaborar sus vinos Tracia para focalizarse en el segmento de la venta a granel tanto en el mercado interno como externo.
Dentro del país venderá sus caldos de producción propia a firmas mendocinas como Catena Zapata, Peñaflor, Bianchi, Callia y Navarro Correas, entre otros. También intentará comercializar vino en los mercados externos, poniendo el foco en Estados Unidos y países de Europa, aunque ya no fraccionado en botellas. En la firma no revelaron los motivos, pero sin dudas responden a tratar de acomodarse a una nueva dinámica del mercado y a la búsqueda de rentabilidad.
Desde diversos sectores de la cadena vitivinícola -productor, elaborador, trasladista- lamentaron la pérdida de valor agregado que esto significa para la provincia, y se reavivó la polémica por las cadenas de comercialización del vino donde los que más ganan son supermercados y las grandes bodegas dominantes. En los supermercados es donde se vende más del 50% del vino embotellado del país, pero imponen condiciones leoninas que prácticamente dejan fuera de juego a las pymes bodegueras.
Ante ese escenario, sólo las grandes firmas pueden pelear mano a mano con las cadenas, con lo cual también se profundiza la concentración bodeguera en 4 o 5 grupos. Como resultado, la brecha de precios que existe en la cadena de comercialización favorece a los eslabones más grandes.
‘’Se sigue distorsionando el mercado a partir de las grandes cadenas, son los dueños del mercado. Si vos querés ser masivo y estar en la góndola tenés que pagar un precio de locos, que son los costos de promoción, de punta de góndola, y demás. Y si no, la bodega se tiene que quedar en el minoreo y no dan los números porque son pequeños volúmenes’’, opinó Marcelo Ureta, presidente del Consejo de Enólogos.
Agregó que esta situación le da más ventaja a las grandes bodegas que son las que tienen espaldas para mantenerse en las góndolas. ‘’Con este cierre San Juan pierde posibilidades de poner valor agregado a su producción, y su calidad sale por otro lado. Habría que rever las políticas de Estado para ver cómo se puede hacer el negocio más rentable’’, sentenció Ureta.
Ángel Leotta, titular de la Cámara Vitivinícola que agrupa a bodegas elaboradoras trasladistas, coincidió en destacar el monopolio del mercado como un factor negativo y culpó a las góndolas de los súper de destruir ‘cada día’ al pequeño bodeguero. ‘Te bajan los precios, te ponen promociones, te rebajan tantas cajas, esa es la dificultad’’, dijo, aunque agregó también que en la actualidad el fraccionamiento no es tan rentable como se piensa. ‘’Un establecimiento importante con bodega y cultivos importantes, hoy no tiene rentabilidad, porque si la tuviera seguiría funcionando. No cierra la puerta, pero se dedica a hacer vino a granel y perdemos mano de obra, perdemos valor agregado y una firma sanjuanina que logre insertar etiquetas en el mercado del fraccionado’’, lamentó. Juan José Ramos, que dirige la Asociación de Viñateros Independientes, quien también habló de la posición dominante de los supermercados y comentó que le aflige que los vinos de Finca del Enlace ya no serán identificados como propios de San Juan, y en muchos casos saldrán con etiquetas mendocinas. Además analizó que el actual atraso cambiario le complica la labor a una pyme fraccionadora, haciendo que sea más rentable vender a granel tanto en el mercado interno como externo.
FUENTE Y FOTOS: Diario de Cuyo - Periodismo365
