El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) interdictó en Chaco, 15.040 kilogramos de frutas cítricas que eran transportadas incumpliendo las condiciones sanitarias exigidas para prevenir el Huanglongbing (HLB) y determinó su regreso a la localidad entrerriana de Chajarí, de donde provenían.
En un operativo de rutina realizado en el puesto de control de tráfico federal ubicado en el acceso al puente interprovincial Chaco-Corrientes, agentes del Centro regional Chaco-Formosa del Senasa observaron que un camión transportaba cítricos con tallos y hojas, en cajones con restos de tierra, transgrediendo las siguientes normas: Resolución Senasa 31/15, Disposición 6/2006 de la Dirección Nacional de Protección Vegetal del Senasa y ex SAGPyA 145/83.
La carga compuesta por 3.600 kilogramos de naranja, 11.000 kilogramos de mandarina y 440 kilogramos de limones, provenía de la localidad entrerriana de Chajarí y tenía como destino Presidencia Roque Sáenz Peña, Chaco.
Al realizar la inspección ocular, los agentes del Senasa detectaron que las mandarinas presentaban tallos y hojas y en sus cajones había restos de tierra, lo que hace suponer que la carga se efectuó en un campo y no en un establecimiento de empaque como figuraba declarado en el Documento de Tránsito Vegetal (DTV). Por lo antes expuesto, preventivamente, los agentes del Senasa interdictaron la carga y dispusieron su regreso a origen.
Una vez en la planta de empaque entrerriana la mercadería fue procesada, los cajones recibieron el tratamiento correspondiente y se realizó la identificación de la totalidad de la fruta. Todo este procedimiento fue fiscalizado por agentes del Centro Regional Entre Ríos del Senasa. Finalmente, la mercadería pudo trasladarse a la localidad de Sáenz Peña.
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