Padres de alumnos hicieron largas filas desde cinco días antes del inicio de inscripción para poder contar con un banco para el ingreso a primer grado el próximo año escolar en Sáenz Peña. La inscripción comenzará hoy lunes. Uno de los tantos casos que se da en la ciudad, fue en la escuela del barrio Reserva Este, UEGP 38 “Josefa Rossello”.
Una problemática recurrente, que se acentúa con el correr de los años, donde la demanda para el ingreso a la escuela primaria aumenta, y sin embargo la matrícula de alumnos para primer grado, es exigua de acuerdo a la gran demanda. Con carpas, silletas y mates, más de medio centenar de padres, debieron pasar la primera semana del último mes de año, para poder anotar a sus hijos para el ingreso a primer grado, en la mencionada escuela.
Lo que más sorprendió de la situación que se agrava con el correr de los años, es que solamente primer grado dictan las actividades escolares por la tarde en la mencionada institución. Por esos inconvenientes, en la escasa matricula en escuelas de la ciudad, de gestión pública, es que los padres deben realizar las filas en algunos casos, hasta una semana antes del inicio de las inscripciones, donde NORTE pudo dialogar con los padres y familiares.
“Estamos la cantidad justa”
Al referirse sobre la situación de los más de cincuenta padres que estuvieron en la vereda de la escuela, y donde la directora de la institución –según comentaron algunos padres- la misma habría tenido la intención de poder mediar ante la Regional Vll Educativa, para anticipar el día de inicio de inscripción, cosa que fue denegada por parte de la máxima autoridad educativa de la ciudad.
“Los padres que estamos en la fila somos exactamente la cantidad justa de bancos que se dispondrá para primer grado el próximo año”, remarco Edgardo González Mendoza, uno de los padres, que el pasado viernes por la mañana bien temprano estaba en la fila.
Así como Edgardo, fue el caso de Silvana, familiar de un alumno que concurrirá el próximo año a la escuela Rossello, quien dijo que está en la fila turnándose con su hermana que debe trabajar, y para no perder el lugar se pasan horas en la vereda de la escuela, entre varios familiares, conto.
Una de las pocas escuelas que no hace paros
“En esta escuela, los docentes no hacen paro, por eso traemos aquí los chicos”, dijo Marianela Canteros, tía de dos chicos de los cuales uno va a tercer grado y la más chica ingresará a primer grado. Así la definieron la mayoría de los padres, al referirse a la escuela Rossello, una de las pocas instituciones educativas públicas primarias, donde los docentes que concurren al lugar, no hacen casi nunca paro, dijeron ante la presencia de cronistas de este diario. Es por eso de la gran demanda, pero lamentablemente la escasa matricula de escuela no da para más, sobre todo para poder anotar a nuestros hijos en primer grado, se refirió Carmen.
Cada caso, una historia distinta
"No queda otra que esperar, al menos ya estamos en el fin de semana, y estos días el tiempo acompaño bastante no hizo calor al menos”, era la única resignación por parte de algunas de las mamas, tal el caso de Silvana Flores, quien el viernes por la mañana, se disponían a preparar algunos mates tras pasar la cuarta noche en una carpa en la vereda de calle 17 entre 2 y 0 en el barrio Reserva Este, donde tiene el edificio la escuela Josefa Rossello.
Emilia, una mujer que llego desde el barrio San Cayetano, a unas treinta cuadras de la escuela donde estaba esperando para anotar a su hijo, para el ingreso a primer grado, lamento que no se tenga que llegar a esta situación tan extrema donde los padres todos los años deber luchar incansablemente para poder anotar a los hijos para el ingreso escolar, se apenó.
FUENTE Y FOTOS: Norte
