Por el momento hay abastecimiento de oxígeno medicinal, pero la primera víctima es el oxígeno industrial donde ya hay desabastecimiento en las fábricas que lo utilizan. "Hoy oxígeno medicinal hay, pero si colapsa el sistema hospitalario de internación se arrastrará al sistema del oxígeno medicinal como ya ocurrió en países como Perú", alertan desde el sector productor.
La producción de oxígeno hasta el momento no llegó a su pico máximo de producción, aunque triplicó su producción y distribución en las últimas tres semanas, a partir de los altos contagios de Covid producto de la segunda ola. Sin embargo, para atender la demanda hospitalaria, la industria del oxígeno desabasteció a las fábricas con oxígeno industrial, como por ejemplo a la acería Gerdau, en Rosario, Santa Fe.
A partir de un relevamiento entre productores y distribuidores, se puede decir que toda la demanda de oxigeno medicinal, especialmente en el Área Metroplitana de Buenos Aires (AMBA) es abastecida en tiempo y forma, en tanto y cuanto se mantengan los niveles de contagio.
Los puntos de tensión que ocurren en ésta situación excepcional sólo son posibles de evitar si se bajan, si o si, los niveles de contagios. No hay espacios para medidas irresponsables, como permitir una circulación de personas que no se en ninguna otra parte del mundo. Salvo, Brasil, con el colapso y la desgracia a la vista.
Por esto, hoy oxígeno medicinal hay, pero si colapsa el sistema hospitalario de internación, se arrastrará al sistema del oxígeno medicinal como ya ocurrió en países como Perú. La cuestión logística es la que está en verdadera tensión, pues se distribuye tres veces más de producto con los mismos camiones y tanques cisternas.
Para entender la situación vale hacer una enumeración de datos del sector productivo de este elemento vital, que utiliza uno de cada cinco enfermos por Covid: La producción de oxigeno medicinal se concentra en un 90% entre dos firmas: Air Liquide y Linde. El resto se distribuye entre Indura y el conjunto de empresas regionales de origen nacional. Entre todas podrían tener una máxima producción de 1.300.000 metros cúbicos diarios, aproximadamente.
La evolución del consumo de oxígeno medicinal, es la siguiente: en épocas sin pandemia, la demanda era de 200 mil metros cúbicos diarios; cuando llegó la pandemia y los contagios se ubicaron por debajo de las diez mil personas por día, el consumo alcanzó los 393 metros cúbicos diarios, según la OMS; en la actualidad, con picos de 27 mil contagios diarios, la demanda alcanzó entre los 700 mil y los 900 mil metros cúbicos diarios. Lo que demuestras que, teóricamente, todavía hay un rango a favor entre la producción y el consumo.
“Estas cifras son en orden de magnitud correctas, pero teóricas”, explicó Eduardo Pelitti, consultor en temas de criogenia y gases industriales para ésta nota. Sin embargo, alertó que “es imprescindible aprender de la experiencia de Perú y Brasil. No se frenó a tiempo la ola de contagios y puso en crisis el sector hospitalario, primero, y luego arrastró a la industria del oxígeno. Perú importó cantidades enormes de Chile y en Brasil la ciudad de Manaos quedó desabastecida”.
La producción de oxígeno medicinal sale de las propias plantas de las firmas productoras, como así también de las plantas on site que se encuentran ubicadas en las grandes acerías establecidas en el cordón de la Ruta Nacional 9, que va desde Campana, Buenos Aires, hasta Rosario, Santa Fe. Y por supuesto, las dos enclavas en Ensenada, cerca de la refinería de YPF La Plata. De estos principales puntos de producción sale el oxígeno medicinal tanto para las provincias de la Patagonia como para el NEA o el NOA,
Según lo que se pudo saber AIRGAS Noticias, las plantas de producción están funcionando sin parada alguna, por el momento y todo el oxígeno fabricado es procesado sólo para uso medicinal. De ésta forma ya hay faltantes agudos de oxígeno industrial para los sectores de la acería, la metalmecánica y la metalurgia.
Otro punto a destacar es que las firmas nacionales atienden en tiempo y forma la demanda en tiempo y forma en distintas regiones. Por ejemplo, Cascia Gases, desde Tucumán a todo el NOA, e incluso a Córdoba y Santa Fe. Además, exporta a Bolivia y Paraguay, hasta hace un mes. Gases Sudamericanos en Rosario y parte de Entre Ríos; La Platense en San Juan; o las instaladas en el conurbano bonaerense como Gases Comprimidos y Avedis.
Lo que puede surgir rápido, de no bajar el nivel de contagios, porque la demanda es pareja en todo el territorio, es que el cuello de botella en el suministro de oxígeno medicinal se concentre en la distribución. Se percibe una lenta carga de los camiones cisternas, debido a la falta de stock en plantas. Entonces, se produce oxígeno y al momento se carga para su despacho.
Respecto a la disponibilidad de cilindros, la ventaja que tiene la Argentina es que hay tres firmas dedicadas a la fabricación de tubos: Kioshi (con su planta robotizada en Lanús); Inprocil (Gualeguay, Entre Ríos) e Inflex (con su unidad productiva en San Luis). Las tres además de fabricar para el mercado interno, mantuvieron exportaciones a la región (Perú y Bolivia, especialmente) en el último año.
FUENTE Y FOTOS: Airgas Noticias
