Si bien no es la forma de trabajar de ninguna de las empresas funerarias, fuentes del sector consultadas por Periodismo365 aseguraron que "cada vez más y casi en un 90 por ciento, la gente está optando por suspender los velorios de noche. Nosotros consultamos con la familia del fallecido, y si están de acuerdo procedemos a cerrar la sala y dejar un vigilador hasta el otro día. Pero la mayoría de las veces son los mismos allegados y familiares los que nos piden suspender el servicio durante toda la noche. Hay mucho miedo en la gente, tienen temor a que les roben sus motos, o que los esperen a la salida en las cercanías, o no quieren andar muy tarde por sectores barriales de regreso a sus domicilios. Incluso hay personas de otros pueblos o del campo que primero nos consulta si un determinado velatorio estará habilitado en horario nocturno, para no venir desde lejos y encontrarse con la sala cerrada", señaló uno de los empresarios.
Otro de los referentes del sector recordó que en varias oportunidades se produjeron robos en pleno velorio y hasta de día. "Uno o varios sujetos ingresan a la sala y se hacen pasar por parientes, miran un poco, roban lo que pueden y después desaparecen. Nosotros como empresarios no podemos andar preguntando a cada uno que ingresa si son o no parientes, y como nadie los conoce, cuando se dieron cuenta ya es demasiado tarde, y en esas situaciones nadie va a andar haciendo denuncias así que todo queda en la nada. Estamos realmente mal como sociedad, llegamos a un extremo donde ya no respetan ni a los difuntos", lamentó.
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