“En ese enfrentamiento hubo disparos de los manifestantes, de la policía, de los vecinos y comerciantes. Fue un contexto de batalla campal. Es una situación bastante compleja dentro de la causa y por eso es bastante complicado hoy en día determinar quién fue el autor del hecho”.
El abogado de la familia de Ismael Ramírez, Mauricio Masín, reconoció así las serias dificultades que tiene la Fiscalía para individualizar al autor del homicidio del niño de 13 años que murió de un disparo en el pecho en medio de un presunto intento de saqueo en un supermercado de Sáenz Peña, hecho ocurrido el 3 de septiembre pasado.
En declaraciones a Radio Natagalá, y previo a la marcha que se iba a realizar este miércoles en Sáenz Peña pidiendo justicia por Ismael, Masín sostuvo que hace varias semanas que la causa perdió presencia mediática.
“Se cumplieron más de tres meses del asesinato de Ismael y con esta marcha se le está intentando dar la mayor fuerza posible”, explicó. Masín comentó además que hace pocos días asumió la querella y dijo que solicitó varias medidas de prueba entre las que se cuenta la nómina del personal sanitario que atendió al niño la noche de su muerte.
“Por otro lado se está trabajando en algunos videos que faltan agregar a la causa y obviamente observarlos, porque es un cúmulo importante. Aproximadamente son cinco horas de filmaciones”, contó.
“No tenemos ningún otro tipo de indicio. Sino la causa estaría en otro estado”, se sinceró. “Sinceramente la investigación se encuentra en una situación de que todavía no se pudo determinar de qué lado surgió el disparo. Si se pudo determinar que fue un perdigón que solamente pudo ser disparado a través de tres tipos de arma: escopeta, pistolón o tumbera”, afirmó.
“Y obviamente hay que arrimar algunas testimoniales que todavía están faltando producir dentro de la causa que consideramos de importancia. El otro día estuvimos hablando con el fiscal y consideramos importante que todavía no ha declarado el primo de Ismael, que vive en Rosario”, añadió.
Por otra parte, remarcó que hubo una demora por parte del fiscal Marcelo Soto para la realización de los allanamientos, los cuales se realizaron varios días después del crimen. “Es llamativo algunos allanamientos que se realizaron de manera tardía en algunos locales comerciales, tres o cinco días después del hecho. Existió una demora por parte de la fiscalía en la ejecución de los primeros actos de investigación que son los actos más importantes. El fiscal tendrá sus razones”, sostuvo.
El hecho
Ismael Ramírez tenía 13 años. Iba a la escuela 225 de Sáenz Peña. Jugaba al básquet y colaboraba con el merendero de su barrio Mataderos. Vivía con su mamá (de etnia qom) y sus hermanos en un hogar muy pobre. La tarde del 3 de septiembre fue a buscar a su madre, Alejandra Ciriaco, al barrio 713, al otro lado de la ciudad. Lo hizo junto a su hermano de 17 años y un primo de la misma edad.
Justo ahí se generó un presunto intento de saqueo al supermercado Impulso que terminó en una balacera. Después se hablará de que en realidad un grupo de vecinos se manifestó frente al lugar en protesta contra el dueño del comercio porque habría retenido varias tarjetas alimentarias. Lo cierto es que una de esas balas alcanzó a Ismael. Murió a los pocos minutos.
FUENTE Y FOTOS: Chaco Día por Día
