Otro capítulo de los ataques del presidente al principal distrito del país. Ahora dilata la transferencia de obras públicas que Kicillof se propuso finalizar con fondos propios. Los costos.
Axel Kicillof sigue esperando que el gobierno nacional firme el traspaso de las obras nacionales a la Provincia para poder terminar la Autopista Presidente Perón y llamar a licitación por el Canal Magdalena, entre otras obras estratégicas para la gestión bonaerense. Tras la reunión con el jefe de Gabinete nacional, Guillermo Francos, a comienzos de agosto, todavía no hubo avances de ningún tipo.
El pedido del gobernador a la Casa Rosada no es nuevo: desde el comienzo de la gestión viene reclamando por las mil obras por 4 billones de pesos paralizadas en territorio bonaerense y pidiendo a Milei que firme el traspaso de las que considera prioritarias para poder terminarlas con fondos propios. En los últimos meses, la Casa Rosada ya avanzó en acuerdos con 20 gobernadores pero demora la gestión con el bonaerense.
Las diferencias políticas entre Milei y Kicillof se profundizan día a día y tuvieron su pico máximo a fines de julio, cuando el directorio de YPF y la empresa malaya Petronas resolvieron instalar la planta de GNL en Punta Colorada, Río Negro, y no en el puerto de Bahía Blanca, en Buenos Aires. Entonces el gobernador aseguró que la decisión de la petrolera no había sido ni técnica ni económica sino política: “La verdad es que Milei no soporta haber perdido las elecciones en la Provincia y decidió castigar a los bonaerenses porque no lo votaron”.
En la reunión que mantuvieron el 7 de agosto, el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, le pidió a Francos especialmente por estas dos obras que Kicillof considera clave. Quedaron en conformar una mesa de trabajo para llegar a un consenso pero, hasta el momento, Nación no dio ninguna respuesta. «No respondió más los mensajes», señaló Bianco a Tiempo en referencia al funcionario nacional y aseguró que la coordinación «se hace así muy difícil».
Los trabajos en la Autopista Presidente Perón están paralizados desde diciembre. Restan terminar sólo 21 kilómetros de la traza total de 83. Falta señalética, lectores de patentes, radares de velocidad, iluminación, la finalización de bajadas y colectoras, además de personal de seguridad para la vigilancia.
La autopista atraviesa los municipios de Berazategui, Ezeiza, Florencio Varela, Ituzaingó, La Matanza, Merlo, Presidente Perón y San Vicente. Tanto al gobierno bonaerense como a los intendentes de esos distritos les preocupa que, frente al abandono, la ruta se convirtió en zona liberada para el accionar de las bandas narcos. Por eso Kicillof creó un consorcio de gestión que está listo para comenzar a trabajar apenas Milei ceda la obra.
La otra obra estratégica para Kicillof es el dragado del Canal de Magdalena, que se anunció y licitó en el último tramo del gobierno de Alberto Fernández pero no logró avanzar. En La Plata argumentan que esos trabajos valuados en 40 mil millones de pesos son clave para el desarrollo de la Provincia, el comercio exterior y la soberanía nacional. Apuntan que incrementará el transporte de cargas por los puertos bonaerenses, además de permitir la salida y entrada directa entre el mar y el litoral fluvial, sin tener que pasar por Montevideo. Además implicará un ahorro en tiempo y costos logísticos.
"Estamos interesados en que nos pasen la jurisdicción para que podamos llevar adelante el dragado y balizamiento del canal para poder utilizarlo como una ruta alternativa para la navegación. Esta es una vía mucho más eficiente que la de Punta Indio, que obliga a los barcos a transitar por aguas argentinas y pasar por Uruguay a través del puerto de Montevideo", explicó Bianco.
Al igual que con la Presidente Perón, Kicillof se adelantó y creó por decreto una Comisión Asesora para desarrollar propuestas y planes de acción para potenciar el canal y asesorar en las obras de dragado. El organismo funcionará en la órbita del Ministerio de Gobierno.
Acuerdos
Hasta el momento, la Casa Rosada acordó la cesión de los proyectos de obra pública que estaban en poder de la Nación con veinte provincias. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, firmó con los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil; del Chaco, Leandro Zdero; de Chubut, Ignacio Torres; de Córdoba, Martín Llaryora; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, y de Jujuy, Carlos Sadir.
También suscribieron acuerdos el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, y sus pares de La Rioja, Ricardo Quintela; de Mendoza, Alfredo Cornejo; de Misiones, Hugo Passalacqua; de Neuquén, Rolando Figueroa; de Río Negro, Alberto Weretilneck; de Salta, Gustavo Sáenz; de Santa Cruz, Claudio Vidal; de Santa Fe, Maximiliano Pullaro; de San Juan, Marcelo Orrego; de San Luis, Claudio Poggi; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y de Tucumán, Osvaldo Jaldo.
Los mandatarios provinciales con los que el gobierno nacional aún no llegó a un acuerdo son, además de Kicillof, Sergio Ziliotto de La Pampa y Gildo Insfrán de Formosa. Tampoco hubo firma con Jorge Macri de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, pero en este caso es porque no hay obras nacionales pendientes en territorio porteño.
FUENTE Y FOTOS: Tiempo Argentino