Fabricaciones Militares cerró su planta de Jáchal, despidió a todos sus empleados y remató todos sus bienes.
La que supo ser la tercera planta de Fabricaciones Militares del interior del país, ubicada en Jáchal, San Juan, bajó sus persianas en junio pasado y el pasado 28 de enero remató el mobiliario. En medio de los rumores de que el gobierno nacional venderá la empresa, su activo más importante en la provincia fue el primero en verse afectado por el achicamiento.
Hubo intentos de rescate porque anticipaban que iba a tener demanda con nuevos proyectos mineros, pero no prosperaron. En el departamento del norte aseguran que se sintió el impacto hasta en el comercio, porque era la fuente de trabajo de más de 80 familias con sueldos altos. La fábrica, que cerró en el 2024 y despidió a unos 80 trabajadores, remató hasta una planta completa de producción de Sipolex. Sólo quedó personal de seguridad para cuidar las instalaciones.
El Gobierno nacional continúa con el ajuste en el Estado y sumó un nuevo capítulo para la planta de Fabricaciones Militares ubicada en Jáchal. El cierre definitivo llegó en junio del 2024 y ahora se completó cuando remató todos los bienes.
Se rumorea que las instalaciones de Villa María (Córdoba) y Azul (Buenos Aires), podrían correr con la misma suerte. La planta, que al momento del cierre tenía poco más de 80 trabajadores en su nómina, tenía como objetivo principal distribuir explosivos para la minería local y también proveer a la región Cuyo y el NOA. Esos planes iniciales nunca se concretaron y sólo abastecía a Gualcamayo. Tras el cierre se especulaba con la chance de que la empresa pase a manos privadas, pero el remate total terminó con esa posibilidad.
La subasta la realizó, de manera online, el Banco Ciudad de Buenos Aires a fines de enero. Allí se vendieron los vehículos, todo el mobiliario, contenedores y hasta una planta completa de producción de Sipolex. En la planta, ahora, sólo queda personal de seguridad asignado sólo para la protección de las instalaciones.
El futuro de la empresa estatal dedicada a explosivos y municiones está en duda en todo el país. Las últimas versiones periodísticas indican que podría cerrar la fábrica ubicada en Villa María, Córdoba, y el punto de referencia es lo que pasó en San Juan. Es que la tercera planta más grande estaba en Jáchal, siendo esta la unidad de negocios que vendía explosivos para minería. Fue inaugurada en 2014, en un acto en el que participó a través de videollamada la ex presidenta Cristina Fernández Kirchner. La expectativa era que se convirtiera en distribuidora de explosivos para minería tanto para la provincia como la región Cuyo y el NOA.
Finalmente, los planes para futuro quedaron en nada. El primer gran problema que tuvo fue cuando no se actualizó la infraestructura para hacer emulsiones. Cuando esto ocurrió el producto que ofrecía la fábrica no podía ser adquirido por Veladero y luego, cuando Gualcamayo dejó de extraer nuevo material, la planta quedó fuera de juego. En 2022 la planta se concentró en vender a la minería no metalífera de Valle Fértil, retomaron el plan de mejoras y ampliación y hasta instalaron paneles solares para reforzar su matriz energética.
A pesar de esto, no concretaras las inversiones mayores y así fue que la planta inició el 2024 en plena crisis por falta de demanda de sus productos. En abril pasado las autoridades nacionales de Fabricaciones Militares se acercaron hasta la planta jachalera, hubo reuniones que incluyeron a las empresas mineras que trabajan en San Juan y vecinos del departamento. Existía una solución: reinvertir en la fábrica local para que pudieran empezar a fabricar emulsiones, lo que permitía vender a otros proyectos actuales y futuros. Pero desde Nación nunca llegó la decisión de volcar fondos en la planta local.
FUENTE Y FOTOS: InfoGremiales - El Ciudadano Web