En medio de las negociaciones y los desacuerdos, el Gobierno negoció el quórum para que la Cámara de Diputados debata en una sesión que en principio durará 35 horas y comenzó este miércoles a las 10.
El oficialismo se garantizó el quórum para poder realizar este miércoles la sesión especial en la Cámara de Diputados y la votación favorable en general del proyecto de la ley ómnibus, aunque todavía había diferencias sobre la propuesta del Gobierno sobre la privatización de 40 empresas públicas.
El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, acordó con los jefes de bloques que la sesión, que demandará 35 horas, comenzará este miércoles a las 10. A lo largo de la jornada se definirá a qué ahora se hará un cuarto intermedio, si se hará antes o tras la aprobación en general.
Asistieron a este encuentro, además de Menem, la vicepresidenta primera del cuerpo, Cecilia Moreau de Unión por la Patria (UxP); el vicepresidente segundo, el radical Julio Cobos; los presidentes de bloques de UxP, Germán Martínez; de la UCR, Rodrigo de Loredo; del Pro, Cristian Ritondo; de Hacemos Coalición Federal, Miguel Angel Pichetto, y de la izquierda, Nicolás del Caño, entre otros.
El oficialismo se garantizó el piso de 129 diputados para habilitar la sesión, ya que la oposición dialoguista -la bancada radical, el Pro, Hacemos Coalición Federal e Innovación- anunciaron que colaborarán para conformar el quórum y anticiparon que votará en general el dictamen de la mayoría.
Lo que sucede es que la LLA tiene 38 diputados y 7 aliados firmes, pero necesita el respaldo de las tres bancadas dialoguistas para aprobar cada artículo de la ley y eso no lo tenía garantizada en algunos capítulos, como la privatización de empresas públicas.
Hasta ahora tiene garantizados más de 140 votos para la aprobación en general y necesita reunir por lo menos 128 sufragios -teniendo en cuenta que Menem no vota- para imponerse en cada capítulo del dictamen de un proyecto que finalmente tiene 385 artículos, de los 524 originales.
LOS ACUERDOS QUE NO LOGRÓ CERRAR LA LIBERTAD AVANZA
Tras quitar el capítulo fiscal y el sistema de actualizaciones de jubilaciones, los principales puntos del dictamen de mayoría que se debatirán serán la declaración de emergencia pública, la reforma del Estado, y las privatizaciones de empresas públicas.
Por ese motivo, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, mantuvo conversaciones con los bloques dialoguistas para superar las diferencias sobre privatizaciones, seguridad, pesca, hidrocarburos, biocombustibles y aumentos de impuestos internos.
En cuanto a las facultades delegadas, el Gobierno aceptó limitar la emergencia pública de once a siete materias: económica, financiera, fiscal, de seguridad, tarifaria, energética y administrativa, aunque aún había un pedido de Hacemos y la UCR de eliminar la energética, tarifaria y de seguridad.
Sobre las privatizaciones, el Poder Ejecutivo propone vender todas las empresas públicas -con excepción de YPF- y en el caso de Nucleoeléctrica, Banco Nación y Arsat se estableció que el Estado solamente puede realizar una privatización parcial, debiendo mantener el control de la empresa. Ahí el radicalismo quiere que haya un compromiso para que el Gobierno envíe un proyecto por cada empresa que quiera privatizar, y Hacemos quiere eliminar de esa lista al Banco Nación, Arsat y Nucleoeléctrica.
Desde la oposición dialoguista expresaron preocupación por las joyitas que dejó la negociación: la desautorización el ministro del Interior, Guillermo Francos, tras la reunión con gobernadores y los "likes" del Presidente a tuits que insultaban a la oposición, en algunos casos, con nombre y apellido. Especialmente, dudaban sobre si ese comportamiento iba a repercutir en el recinto o durante el transcurso de la sesión.
El presidente del bloque de diputados nacionales radicales, Rodrigo De Loredo, afirmó que la UCR dará quórum para habilitar el debate del proyecto de ley "Bases" en la Cámara baja y confirmó que "acompañará en general" esa iniciativa para darle al Gobierno "las herramientas que necesita", aunque exigió al oficialismo que sea "una sesión razonable", sin "circos romanos".
De Loredo ratificó que "daremos las herramientas para que un Gobierno que recién inicia pueda llevar adelante su plan de gestión. A pesar de la desorganización con la que el Ejecutivo encaró el tratamiento, los agravios vertidos, no nos guían cuestiones personales, ni el apoyo a personas. Defendemos ideas y el interés del país. Argentina necesita estabilizar su economía y dar certidumbre".
Mientras que desde el bloque Hacemos Coalición Federal anunció que dará quórum este miércoles en la cámara de Diputados y acompañará en general en la sesión convocada por La Libertad Avanza para tratar el proyecto de Ley Bases, aunque reiteró que planteará sus diferencias en la discusión en particular de la iniciativa.
El jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, expresó que su partido "garantizará el quórum y la votación en general" del proyecto de ley "Bases", advirtió que ese texto "no se puede modificar más de lo que ya se modificó" y planteó que el Gobierno "necesita" que la iniciativa sea aprobada para luego sí poder ser evaluado "una vez que tenga las herramientas". El diputado remarcó que el PRO va a "apoyar todo" el dictamen de mayoría en la sesión.
FUENTE Y FOTOS: Política Argentina