DIARCO CERRÓ OTRO SUPERMERCADO EN EL CONURBANO: 25 TRABAJADORES A LA CALLE

Aumenta el desempleo por la brutal caída del consumo en el conurbano bonaerense. Cerró un supermercado en Lanús y suma 25 despidos a la lista negra del comercio



Desde el sindicato aseguran que ya van 1.200 empleos perdidos en la regional Lanús-Avellaneda. La actividad no repunta y las ventas siguen desplomándose según los datos de Ministerio de Economía bonaerense.


Remedios de Escalada padece los golpes de la recesión económica orquestada por el Gobierno nacional. La baja rentabilidad y la caída en las ventas fueron los motivos que la firma Diarco les dio a los 25 empleados de la sucursal ubicada en la localidad del municipio de Lanús cuando amaneció con las puertas cerradas esta semana. “No avisaron nada”, afirman desde el Sindicato de Comercio. Esta decisión se suma al cierre de la sucursal de la misma firma en Berazategui. En la Provincia perciben que no hay señales de recuperación económica.

“Se presentaron a trabajar y se encontraron con la novedad de la gerencia que les dijo que la sucursal cerraba de forma definitiva”, señala a este medio Orlando Machado, al frente de la regional del gremio que aglutina a los empleados de comercio de Lanús y Avellaneda. Asegura que no quieren generar falsas expectativas en los trabajadores y sabe que no hay ninguna posibilidad de que la empresa relocalice a los empleados.

Machado indica que los 25 despidos de Diarco se suman a los 22 que ya realizó Chango Más en la misma región. Agrega que de esta última firma que integra el grupo económico que lidera Francisco De Narváez, ya hubo 200 despidos en la región.

Los motivos siempre se repiten. “Hablan del aumento de las tarifas y la caída brutal en las ventas”, remarca el dirigente sindical. Estas razones no son ajenas a una condición que atraviesa toda la provincia de Buenos Aires. En las últimas horas, el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, publicó en sus redes los datos de las ventas en supermercados del primer trimestre de este año en comparación con el mismo período del año anterior.

“En tiempo récord, las políticas recesivas de Milei destruyeron la mejora en el consumo de las y los bonaerenses”, afirma López. En un gráfico muestra cómo las ventas en los supermercados de la provincia cayeron un 8,6 por ciento en el período analizado. Sólo en marzo, la caída fue del 6,2 por ciento. Esto se combina con un derrumbe del 10 por ciento en la actividad económica y de un 22 por ciento del poder adquisitivo de los salarios de los bonaerenses.

Al respecto, López señala que no hay repunte y toma como parámetro los datos publicados por el titular del Banco Provincia, Juan Cuattromo. Allí se advierte que en el mes de abril de este año en comparación al mes de abril de 2023, el consumo con tarjetas de la banca pública bonaerense se contrajo más de un 35 por ciento. El 21 por ciento, detalla Cuattromo, se dio en los supermercados. En este contexto, Machado mantuvo una reunión con los directivos de Diarco en la sede del Ministerio de Trabajo de la provincia y aseguró que estarán pagas todas las indemnizaciones correspondientes.

No hay V

El mismo miércoles del cierre, cuenta Machado, se apersonó en la sucursal que el mayorista Diarco tiene sobre la avenida General San Martín. Acudió ante el llamado de su delegado e inmediatamente se convocó a una asamblea para evitar el vaciamiento de la mercadería del lugar y el peligro de no tener capitales sobre los que se pueda reclamar. Allí se pactó un encuentro en la cartera laboral de la provincia que comanda Walter Correa. “La empresa se comprometió a pagar todas las indemnizaciones”, remarca.

Afirma que los despidos en los supermercados van de la mano de los cierres de múltiples comercios y la pérdida de 1.200 trabajadores del rubro sólo en su regional. “Se van echando empleados para poder mantenerse abiertos, pero la verdad que nunca vi tantas persianas bajas”, sostiene Machado.

En su experiencia, nunca presenció una caída tan fuerte del consumo en tan poco tiempo. Esto, advierte, llevó a que, por ejemplo, casi todos los comercios de ropa o insumos que no son de primera necesidad sobre la avenida Centenario Uruguayo, la cual nace en Avellaneda y termina en el cementerio de Lanús; estén cerrados.

No es la única región que atraviesa esta caída del consumo. Consultado por Buenos Aires/12, Juan Larrañaga, miembro de Megaunión ACE, una entidad que aglutina a 34 supermercados medianos de la zona sur de la provincia, y tiene su sede en Florencio Varela, asegura que el derrumbe continuó en mayo. “Y eso que aún no llegaron los aumentos de tarifas y habrá que ver qué pasa con los impuestos provinciales y municipales”, dice.

“En abril hubo una caída del 7,5 por ciento en las ventas, no en volumen sino en plata, a lo que se suma una inflación cerca del 9 por ciento, que cuando sumas te da que a caída estuve por el 15 o 16 por ciento”, explica Larrañaga. Adelanta que mayo no mostró una mejora. Sostiene que la caída fue menos y estuvo entre el 4 y el por ciento, pero siempre habla de caídas de ventas.

Al respecto, López precisó que, en términos reales, la comparación entre el primer trimestre de 2024 con el de 2023 muestra una caída en las ventas de los supermercados de casi un 45 por ciento en electrónica, más de un 20 por ciento en bebidas y más de un 7 por ciento en carnes.

En continuidad con estos números, Cuattromo mostró que, según el índice de consumo que elabora cada mes la Gerencia de Estudios Económicos del BAPRO, la región metropolitana de Buenos Aires cayó más que el interior de la provincia y las bajas más pronunciadas de hasta el 43 por ciento se dieron en la zona sur.

Más números negativos

En las últimas horas, López amplió la información sobre la desalentadora situación económica que vive la provincia. “No hay señal de recuperación: la recesión se profundiza mes a mes, perforando registros de la cuarentena”, señaló el ministro de Axel Kicillof.

Según los datos del indicador a nivel nacional, el 90 por ciento de los segmentos industriales que son relevados presentan caídas interanuales. Esta generalización del retroceso es la más alta registrada y que ni siquiera se dio durante el peor momento de la pandemia, en la primera mitad de 2020.

Todas son pardas a nivel país:

La capacidad instalada en la industria nacional cayó un 9,6 por ciento en el primer trimestre de este año comparado con igual período de 2023. En el plano de la construcción, la contracción estuvo por encima de los 40 puntos a partir de la paralización de la obra pública que, entre otros escenarios, llevó a que el desarrollo de asfalto caiga casi un 70 por ciento.

Según la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) hasta el mes de abril la caída acumulada de las ventas minoristas es del 18,4 por ciento. Respecto a los salarios, sólo con tomar los datos del INDEC se observa una merma en el poder adquisitivo que pisa los 20 puntos en los trabajadores registrados.

La variación interanual de las inversiones para el mes de marzo arrojó un desplome de 22 puntos. A febrero de este año, sólo entre los rubros de la construcción y la industria, acumularon 51 mil puestos de trabajo menos. “La presunta recuperación en V es una falacia: los indicadores muestran la profundización de la recesión”, concluyó López.

FUENTE Y FOTOS: Página/12

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