En una audiencia ante la Justicia Federal, siete efectivos de la Policía del Chaco serán informados formalmente este domingo de la imputación que pesa sobre ellos tras el intento de robo de cerca de 9 kilos de cocaína durante una quema judicial en Colonia Benítez. El hecho fue descubierto en pleno operativo, ante la presencia de autoridades provinciales y judiciales, y derivó en detenciones, sumarios internos y cambios en la cúpula policial. La causa se investiga bajo el nuevo sistema acusatorio federal.
La Justicia Federal de Resistencia hará este domingo a las 17.00 horas, vía Zoom, la formalización de la investigación contra los siete efectivos de la Policía del Chaco acusados de intentar sustraer alrededor de 9 kilos de cocaína durante una quema judicial realizada el jueves en el Polígono Policial de Colonia Benítez. La audiencia se llevará a cabo en el marco del nuevo sistema acusatorio federal, según pudo confirmar LITIGIO.
Durante la audiencia, los imputados -asistidos por sus defensores- serán informados de los delitos que se les atribuyen, de la carátula de la causa y la legalidad de la detención, con intervención de la jueza de Garantías Zunilda Niremperger. La acusación estará a cargo del fiscal federal Patricio Sabadini, responsable del Área de Investigación y Litigio de Casos Complejos de la Unidad Fiscal de Resistencia, junto a la fiscal interina Ruth Hilgenberg. ¿Por qué se realiza un domingo? Es debido a que se cumplen las 72 horas máximas de detención que establece el Código Procesal Penal Federal.
Cabe mencionar que el juez federal Ricardo Mianovich se inhibió de intervenir en el proceso, ya que estuvo presente durante la polémica quema y su juzgado tramitó la mayoría de las causas en las que se había secuestrado la droga incinerada.
Los policías imputados son el comisario César Alegre, el subcomisario Andrés Franco Ramírez, el oficial principal Lucas Exequiel Martínez, el sargento Gustavo Jesús Acosta, los cabos Gustavo Andrés Quizama y Néstor Ariel Urne Canteros; y el cabo primero Juan Nicolás Almirón Núñez, todos pertenecientes a la Dirección General de Consumos Problemáticos (ex Drogas Peligrosas).
La mayoría de los acusados permanecen detenidos bajo custodia de la Prefectura Naval Argentina en Barranqueras, salvo Ramírez y Quizama quienes se encuentran alojados en dependencias de Gendarmería Nacional, en Formosa y Las Lomitas.
El hecho
Una maniobra que podría calificarse de temeraria fue la que se descubrió el jueves por la mañana en el Polígono que la Policía del Chaco tiene en Colonia Benítez. En el marco de una quema de tres toneladas de marihuana y 80 kilos de cocaína, funcionarios de la Justicia Federal constataron que se estaban produciendo irregularidades en el proceso de destrucción de los estupefacientes. Más precisamente: se estaba quemando menos droga de la prevista.
¿El motivo? Un grupo de uniformados de la Policía del Chaco que participaban del operativo se las estaban guardando, tanto en sus mochilas como en la caja de uno de los patrulleros. Ante esta situación, siete efectivos del Departamento de Consumos Problemáticos fueron arrestados en el lugar y quedaron a disposición de la Justicia Federal. Se estima que intentaron llevarse aproximadamente 9 kilos de cocaína, valuada en unos 225 millones de pesos.
A este escandaloso panorama, se le sumó que, en el operativo estaban presentes el ministro de Seguridad, Hugo Matkovich; el jefe de Policía del Chaco, Fernando Romero; el juez Mianovich y hasta medios de comunicación locales que registraron los pormenores del operativo. Dicho de otro modo: los narcopolicías estaban robando en las narices de autoridades judiciales y provinciales, a plena luz del día y frente a las cámaras, con total impunidad. Vale remarcar esto: de no haber sido por la lucidez de los secretarios del Juzgado Federal 2, el robo se hubiera producido sin inconvenientes.
Patético
Consultado por medios locales, el juez Mianovich calificó como “patético” el accionar de los efectivos involucrados. Según relató, la irregularidad fue detectada cuando una de las cajas que inicialmente pesaba 9 kilos regresó con un kilo menos tras ser trasladada. La maniobra fue advertida por personal del juzgado, que dio aviso inmediato a la Fiscalía Federal.
Las requisas posteriores permitieron hallar más paquetes de cocaína ocultos en un patrullero, lo que confirmó la magnitud del intento de robo. La totalidad de la droga quedó bajo custodia de Gendarmería Nacional y se secuestraron teléfonos celulares y otros elementos de interés para la causa.
En paralelo a la investigación penal, el Órgano de Control Institucional (OCI) de la Policía del Chaco inició un sumario administrativo y dispuso la suspensión sin goce de haberes de los siete efectivos, por la presunta comisión de faltas gravísimas.
Además, el jefe de la Policía, Fernando Romero, ordenó cambios en la Dirección de Investigaciones: el comisario inspector Rolando Sosa fue separado del cargo y reemplazado por el general Nelson Alvarenga, mientras avanzan las actuaciones judiciales y administrativas.
Romero reconoció el impacto institucional del caso y advirtió que el hecho afecta seriamente la credibilidad de la fuerza. “La Justicia Federal ya no nos va a ver con la misma confianza”, afirmó en declaraciones a Diario Chaco, al tiempo que sostuvo que será necesario “volver a empezar”.
Fuente y fotos: Litigio

